25 de septiembre de 2016

Buenos Aires… Nuevos Aires.

“Quereme así, piantao, piantao, piantao...
trepate a esta ternura de loco que hay en mí, 
ponete esta peluca de alondra y volá, volá conmigo ya
Balada para un loco. Música: Astor Piazzolla. Letra: Horacio Ferrer.

Buenos Aires, denominada oficialmente Ciudad Autónoma de Buenos Aires, es la capital de la República Argentina y el principal núcleo urbano del país. Está situada sobre la orilla occidental del Río de la Plata, en la llanura pampeana.


Desde el primer asentamiento Puerto Nuestra Señora del Buen Ayre (1536) hasta el Baires actual (2016), han pasado un par centurias de conflictos, amores, desamores y diferentes culturas con idiosincrasias muy marcadas que se entremezclaron para formar el increíblemente bello cocoliche (término “técnico” acunado por mi ex profesor y padrino de profesión el Arq. Dario Avila) que es la ciudad hoy en día. Cocoliche viene a ser algo así como una mezcla caótica de cosas muy diferentes. Para mí, es una palabra que sintetiza esa mixtura confusa de elementos que pelean constantemente por sobresalir en el contraste, pero con una especie de ternura que subyace. Podría definirse en una palabra como “eclecticismo”.
puerto madero
Puerto Madero
Esta ciudad ha sido mi segundo hogar desde siempre. El origen de siempre sería un poco (poquitito) más de treinta años atrás. Hoy, debido a razones de estudio, me encuentro nuevamente viviendo en la ciudad de la furia. Y tengo la increíble oportunidad de poder disfrutarla de vez en cuando como si fuera turista. Porque podés haber pasado la vida entera acá y, aún así, hay rincones por descubrir. La magia está en mirarla con ojos curiosos, hambrientos y sedientos por conectarse con su espíritu. Ese espíritu de arte, historia, creación y reinvención constante que inspira.
puerto madero
Puerto Madero
Si   hay algo sumamente placentero es caminar por Buenos Aires en fin de semana. Una tarde fresca, con sol que entibia el alma y una calma que durante la semana laboral parece imposible de concebir. El río, el viento, los porteños, los turistas, los cafecitos y el tango en cada rincón. 

Llego a la esquina, debo esperar a que el semáforo indique que se puede cruzar. Entonces cierro los ojos durante unos segundos, siento el aroma a café que perfuma el aire y el sol que acaricia gentil, como haciéndome saber que “confíe porque todo saldrá bien”. Abro los ojos nuevamente y veo los árboles de Paseo Colón, una avenida ancha que sirve de límite entre San Telmo y Puerto madero. Decido entonces disfrutar del trayecto, entre cada uno de los locales que debo relevar para la investigación de mi tesis, como si no hubiera prisa, como si fuera una turista más. Definitivamente, la mejor decisión que tomé en los últimos días. 
fragata sarmiento
Fragata Sarmiento (Puerto Madero)
puente de la mujer
Puente de la Mujer (Puerto Madero)
Tengo por costumbre, en cada ciudad que visito, entrar a iglesias y templos (cualquiera sea la religión) para agradecer y pedir por el retorno seguro a casa. De paso, admirar la arquitectura y dejarme llevar por el misticismo de estos espacios que invitan a la reflexión y te hacen sentir, por un momento, como si estuvieras conectado con algo inexplicablemente inmenso, intangible pero real. 
Basílica Nuestra Señora de la Merced (Microcentro)
En una encantadora esquina, me encuentro con la Basílica de Nuestra Señora de la Merced. Si bien Buenos Aires es como mi segundo hogar, el viaje en esta ocasión se produce en un sentido metafórico y casi existencial. Así que, aprovecho y me adentro en este espacio antiguo, oscuro, dorado y hermoso (la profesora de historia que habita en mí disfruta como si fuera una niña en Disney World).
Bóveda, cúpula y altar.
Conocida también como Iglesia de la Merced (1721-1779 Bianchi y Prímoli), es uno de los templos católicos más antiguos de la ciudad de Buenos Aires. Se encuentra junto al Convento de San Ramón Nonato y está ubicada a pocos metros de la Plaza de Mayo, en la zona financiera de la ciudad.
Púlpito (doradísimo)
Una de las capillas laterales
Sus muros están íntegramente decorados con pinturas cuyos efectos de luces y sombras hacen que se perciban como relieves a la distancia. Los mosaicos del piso son una delicia de policromía geométrica.
 
 A veces, bajarse de la rutina y mirar los detalles que encierran la historia de la ciudad es un regalo muy gratificante. Espero hayas disfrutado de este paseo virtual. Y vos... ¿tenés algún lugar preferido en Buenos Aires? Compartí en un comentario más abajo qué lo hace tan especial. Gracias por prestarme tus ojos durante este ratito...


Flor


23 de septiembre de 2016

Del primer hogar a los espacios interiores ...

El útero.

“El seno de la madre es el hogar del futuro niño hasta su nacimiento. Es su primer interior y no hay duda de que lo lleva permanentemente con él. El hombre es un niño siempre pero jamás vuelve a ese espacio, si no es en sueños o juegos sexuales. En el caso de la mujer, constituye un elemento esencial de la arquitectura de su cuerpo, un lugar de intimidad y confort que hay que proteger a toda costa. Si un espacio se concibe más como un útero que como una habitación, todo lo que contenga y el uso al que se destine se verá influido por esta concepción.” Coates.

interiores verde azul estilo nordico escandinavo decape araña
Fuente: instagram.com/homepolish
Cada espacio interior que habitamos influye directamente en nuestro ser y sentir. Nos demos cuenta o no de ello, somos afectados por los elementos del entorno que nos rodea. Sin entrar en tópicos esotéricos, muchas veces percibimos un cambio en nuestro humor después de haber ingresado a un espacio interior determinado, o incluso después de haber movido algunas cosas de lugar o pintado la pared de un color distinto. Más allá de la novedad, estos cambios nos afectan directamente y a largo plazo. Aún cuando las diferencias sean sutiles, nos podemos dar cuenta de que hay “algo que fluye mejor” y me siento más cómodo o “algo que me hace ruido” y me siento molesto.

Escuchar las señales que nos da nuestro cuerpo es fundamental para lograr relacionarnos mejor con el entorno y reconocer las cosas que podemos modificar para mejorar nuestra calidad de vida. 


piso rosado sandalias doradas
Fuente: instagram.com/glitterguide
Percibimos el mundo a través de los cinco sentidos (vista, tacto, gusto, oído y olfato). Estos sentidos deben ser los principales aliados para los profesionales del diseño, de manera que las herramientas utilizadas para estimularlos o no sean elegidas a conciencia y así el resultado final sea exitoso. El éxito aquí reside en la obtención del beneficio planteado a inicios del proyecto, cuyo objetivo, por ejemplo, puede ser optimizar la calidad de vida del cliente eliminado elementos que lo sobreestimulan o irritan si se trata de una persona ansiosa.

Otro punto importante a tener en cuenta son los colores. No es casualidad que sintamos atracción por unos y rechazo por otros. La sensación que nos provocan ciertos colores tiene relación con aspectos culturales (simbolismo), históricos (experiencias de vida) y hasta fisiológicos.

almohadones de diseño
Fuente: instagram.com/mohatextiles

Aprender a reconocer cuáles son “nuestros colores” tiene un poder de influencia en la calidad de vida que va mucho más allá de lo estético o la moda.


Al tratar los espacios interiores como “úteros” que nutren y dan forma a nuestro día a día, podemos darnos cuenta de lo profunda que es la influencia de todos los factores que habitan en él. Y, así, potenciarlos o no a conciencia para aprovechar lo mejor de cada recurso. No es necesario invertir grandes sumas de dinero ni tener a disponibilidad espacios amplios. Simplemente, basta con hacer un análisis más profundo de todos los elementos a nuestro alrededor, los colores, texturas e iluminación para identificar cuáles nos conviene conservar, modificar, reciclar o desechar.

colores comedor estilo escandinavo
Fuente: instagram.com/interiorhints

La clave está en “observar con todos los sentidos” (no solo con la vista) y comprender las sensaciones y emociones que nos provocan los elementos que nos rodean.


Silvia Porro e Inés Quiroga hablan sobre esta forma de mirar el mundo en su libro El Espacio en el Diseño de Interioresbibliografía obligada para todos aquellos que quieran adentrarse al mundo del interiorismo. Te la recomiendo porque es sintética, clara y precisa con tips simples que te ayudan a comprender mejor los misterios de cada tipo de ambiente.

carina michelli corazon
Fuente: instagram.com/carina.michelli

De esta manera, retomo el rincón del blog de mi primer amor Estudio M Interiorismo. Espero, a partir de ahora, la comunicación sea más constante y fluida. ¡Bienvenid@ nuevamente! Gracias por prestarme tus ojos durante este ratito…

Flor